Amigo mio, he compartido un tiempo valiosisimo contigo. Me has enseñado cosas, que hace alrededor de un año no se me hubieran pasado por la cabeza ni en sueños. Tu has sabido sacarme más de una sonrisa cuando me he sentido mal, aún sin saberlo. Te has desollado codo con codo por mi. Y yo te correspondo como amiga tuya que soy, ¿Que sería de todos nosotros si no tuvieramos a nadie con quien hablar, discutir, criticar, comentar, y en definitiva comparti un buen rato hablando? Eres mi mejor amigo, y por lo tanto representas mucho para mi. Quiero tenerte siempre junto a mi, y no albergo la esperanza de perderte nunca. Esos buenos momentos que pasamos juntos, significan mucho, me haces feliz, porque tu y yo compartimos las mismas aficiones, mismas ideas, mismos sentimientos, tu y yo no somos tan distintos de lo que parece. Porque aunque vivamos lejos el uno del otro, a la vez me siento cerca tuya. Y en definitiva, porque contigo he aprendido que a veces lo imposible no es tan imposible como parece.
¡Te llevo siempre en mi corazón, amigo!
lunes, 17 de diciembre de 2007
Amigo mio
viernes, 14 de diciembre de 2007
Destinos, caminos.
Son muchas las preguntas que me rondan últimamente por la cabeza. Cada nueva pregunta es diferente de la anterior, pero guarda en comun la imposibilidad de respuesta por mi parte. Es posible que cada uno de nosotros hayamos nacido con un proposito en la vida, algo que la gente usualmente llama destino. Hoy día no tengo en claro si creo o no creo en él, pero otro significado no le encuentro a la vida. Es posible que tambien no exista tal significado, que simplemente se nazca y se muera. Pero prefiero decantarme por la primera posibilidad.
¿Cual es el proposito de nuestra vida? ¿Cual es la misión que debemos cumplir? tales son las preguntas que me ocupan en estos tiempos.
Cuando me siento a pensar en los acontecimientos llevados a cabo últimamente, de mi actual depresión o como quiera llamarsele, me viene a la cabeza la imagen de mi abuela paterna. Creo que sería la única persona capaz de comprenderme. Lástima, la conocí tarde. Ella y yo nos hubieramos entendido muy bien.
No sin pena, dejo estas preguntas y dudas abiertas al exterior. Yo ya sé que jamás podré responderlas, pero albergo la esperanza que alguien exponga sus opiniones acerca de estas.
jueves, 13 de diciembre de 2007
Apariencias, engaños.
Una de las razones por la que deseo volver a mi niñez, es porque conforme vas creciendo te das cuenta la falsedad de la gente, descubres multitud de apariencias y engaños, y llegan a tus oídos relatos y hechos que jamás hubieras imaginado, y que comparandolos con lo que llevas de vida te choca fuertemente. Es curioso la cantidad de mentiras que puedes escuchar en un día, y la hipocresía de las personas al contarlas. Pasan desapercividas, entre frase y frase, de forma rutinaria. Ahora que miro hacia atrás, me doy enteramente cuenta que he perdido dos años de mi vida. Nunca tuve una preadolescencia, pues pasé de la infancia a la adolescencia directamente.
Por más que le doy vueltas a la cabeza, no lo entiendo. No entiendo como has podido herirme tanto. Y lo sigues haciendo sin darte cuenta. Me ahogas en una negrura espesa, entre la depresión y la muerte. Yo, por mi forma de ser, soy incapaz de reaccionar. Te miro, me miras, y me preguntas que qué me pasa. Yo hago como si no pasase nada, y niego con la cabeza, pero en el fondo, mi corazón grita desesperadamente, queriendo ser escuchado. Todos los días pasa lo mismo. Los hechos se repiten de forma rutinaria, y cada vez la raja de mi corazón de hace más grande. Te odio tanto...y a la vez no quiero perderte, porque eres la única persona que confía en mi...son tan contradictorios mis sentimientos...desearía arrancarlos de mi alma para encerrarlos en un cofre bajo llave, y hundir el cofre en lo más profundo del mar...
Pero es que eres tan falsa conmigo..., solo muestras a la luz tus apariencias, tus engaños. Cuando en verdad yo se que no eres así, yo se que me admiras, me quieres. Pero en cambio eres injusta conmigo, y ¡te lo reprocho! añoro tiempos pasados,... tiempos en los que todavía conservaba la inocencia de una niña, esa inocencia que tapa todos los problemas y que no ve ni escucha la maldad,... la pura inocencia de quien desconoce la verdad.
Ahora, me siento más sola que nunca; y tengo la sensación que nunca volveré a salir de mi soledad. Que este mundo no esta hecho para mi. Y que como nadie me quiere realmente, nadie merece mi amor.
¡lagrimas!
miércoles, 12 de diciembre de 2007
Sola en medio de un montón de gente.
¡Cuan profundo es mi sufrimiento! ¡Que terrible, la soledad!
Aquella que cabalga junto a mí por el confuso sendero. Lloro día y noche, noche y día, porque no he sabido vivir, compartir mi "yo" interno y verdadero con los demás. Nadie mas que yo tiene la culpa. Me siento desdichada, impura, indigna de algo tan sagrado que felizmente cedería hay alguien más adecuado que yo. Que dura es la injusticia, y la discriminación, ¿Por qué no podemos ser iguales? en este mundo tan dividido...
No hay consuelo para mi. Mucho camino me queda por recorrer aún, camino pedregoso, incierto y tramposo. No quiero la compasión de nadie, no estoy pidiendola. Quiero algo muy valioso, quizá lo más valioso que conozco, más incluso que la vida misma: la felicidad.
¿Me preguntas que si me siento mal? uff,... No me hagas reir por favor. No entiendo tu hipocresía conmigo, sabes perfectamente lo que pasa, y si no lo sabes, es que no sabes escuchar... Si realmente me quisieras, solo un poco, me verias de verdad y sabrias perfectamente la injusticia que estas cometiendo conmigo. Sinceramente, no me siento tu amiga. La única amiga que realmente mantengo es mi soledad. No pienso leer lo que escribiste, porque no lo mereces. Eres egoísta e hipocrita al decir que tu eres desdichada, cuando no sabes ni una milesima parte del sufrimiento que ahora me ahoga por tu culpa. Mi corazón está hundido en lo más profundo, y temo porque no vuelva a salir a fuera. Lo hiciste bien, jajajajajaja, primero me abriste el pecho, luego, con una mano cogiste mi corazón, una vez aprisionado en tu garra, lo sacaste de mi interior, y una vez que dejó de latir, lo tiraste de una patada a la basura. jajajajajaja.
¡Te Odio!
Porque lo que hiciste es una de las razones por las que ahora me sienta sola en medio de un montón de gente.